lunes, 25 de octubre de 2010

"Aromas Matutinos"

Entre mis sábanas, encuentro uno de tus cabellos y tu olor me invade. No está ahí sino en mi cabeza pero lo siento, ese olor que destilas a cualquier hora del día, ese que te pertenece. Con los primeros rayos del sol en mi cara percibo tu aroma y te siento dentro de mí. Te huelo en mi mente y estamos en todos lados y en ninguno. Siento el salitre en tu piel de esa playa que nos vio enamorarnos, siento la humedad de esas lágrimas que hemos derramado pero que no fueron lloradas en vano, siento el sudor al que me he vuelto adicto, siento tus manos estrujando mi alma, tu mirada en la mía, mi lengua en tu cuello, tu aliento susurrando esas palabras que han de quedar en secreto entre nosotros.

Es increíble lo mucho que puede hacer un aroma y más increíble es lo que puede hacer aún cuando está sólo en tu mente. Aún no despierto y estamos aquí, allá y en todos lados. Mis sentidos se activan con el más mínimo de los estímulos, pero es tuyo así que tiene sentido. No sabía lo importante que eran los detalles, lo decisivo que es un beso, lo memorable que es una caricia, lo placentero que es un olor. Te huelo y estás aquí conmigo, entrelazados, corazones acompasados, una misma meta. Te huelo y estoy dentro de ti. Te huelo y sé que es así.

"Narratofilia"

Del latín narrare (narrar) + philia (fijación, amor por).

Lo diré una, lo diré dos, lo diré tres veces y todas las que hagan falta: Un buen escrito es como el buen sexo.

No puedes forzarlo, nace de manera espontánea. Sólo aparece y está ahí ante ti, listo para ser materializado y disfrutado. Sabes que un escrito es bueno cuando lo terminas sin darte cuenta, es casi como un orgasmo: tan fugaz que antes de que te des cuenta ya acabó todo, pero saboreaste cada segundo mientras duró. Las palabras nacen solas como una caricia espontánea, como un beso entre dos amantes que no tiene un motivo específico para existir.

Cada escrito es perfecto dentro de su imperfección, de nada vale releerlos mil veces porque SIEMPRE vas a encontrar un punto que falta, una coma que sobra, una palabra que suene mejor que otra. Déjalos quietos, así nacieron y así han de morir. Es como visitar recuerdos y frustrarse por haber podido hacer las cosas de manera distinta: no hay nada peor que el arrepentimiento. Cada momento es perfecto dentro de su imperfección, cada momento es único dentro del espacio y tiempo. Ningún beso es idéntico a otro, ninguna caricia, ninguna tarde de pasión, ¡son únic@s e irrepetibles!

Pasé días, mejor dicho semanas queriendo escribir algo nuevo. Caminando por la calle bombardeándome de ideas que se quedaron en utopías y se esfumaron sin pena ni gloria. Anotando nombres atractivos pero vacíos, sin sustancia, sin caracteres suficientes que los respaldasen y les dieran sentido y forma.  Por eso digo, forzar un escrito es como masturbarse sin estar excitado: acabas pero obviamente no es lo mismo. Es como escribir una carta de amor por encargo, un poema sin alma ni poesía.

La inspiración es una amante delicada, exquisita, selectiva y te somete por completo ante sus antojos. Cuando crees que tienes el control de todo, es sólo una treta para que hagas justa y precisamente lo que ella quiere. Eres un esclavo sexual dispuesto a lo que sea por satisfacerla. Lo peor es que lo disfrutas, por eso no te quejas, sabes que tanto trabajo vale la pena. Y claro, como buen voyerista, siempre disfruto ver las peripecias sexuales de otros: cada escrito es único en su especie, cada cuerpo es un laberinto distinto, cada cabeza es un mundo y me gusta asomarme por las ventanas. Además, hay que ser versátil: leer y escribir,  dar y recibir; disfrutar al máximo.

Por eso lo digo una, lo digo dos, lo digo tres veces y todas las que hagan falta: Un buen escrito es como el buen sexo.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

La sucesora al trono

La artista del momento es Lady Gaga. La ames (como yo), la odies ó simplemente no la entiendas, tienes que admitirlo. Llegó para quedarse, ya lo demostró y ha logrado llenar el main stream musical de ese edge que tanta falta hacía en tiempos de Justin Bieber (el anticristo). Ya no es música pop vacía lista para ser consumidad y digerida sin problemas; sus letras (aunque puedan parecer sencillas a primera vista) poseen una carga emocional inmensa y una complejidad que te captura cuando logras darle tu significado personal ya que su música, como toda obra de arte, está sujeta a la interpretación subjetiva que le quiera dar cada quien a pesar de tener un concepto claro y definido (la verdad depende del ojo con que se le ve).

Mucho también se le ha comparado con Madonna, la actual reina del pop. Si bien hay similitudes entre ambas divas, no todo es black & white en esta vida. La Sra. Ciccone surgió en una época en la que todavía existían muchos tabúes, en especial en todo lo referente al sexo y a la sexualidad femenina. La Chica Material apareció en la escena musical con ritmos bailables, letras pegajosas, un look carecterístico icónico y una carga sexual en todo lo que hacía que shockeaba a las masas y les hacía imposible dejar de verla. Todo su estilo, toda ella gritaba "liberación sexual" hasta dejarte sordo, escupirte en la cara y hacerte entender que tenía razón. 

Ya gran parte del camino para la mujer en la música lo pavimentó Madonna, ha probado todos los estilos y sonidos y también ha creado unos cuantos; Madonna se mantiene vigente porque ha sabido evolucionar. Así como la moda cambia cada 6 meses, tienes que cambiar y no volverte una moda pasajera; mantenerte fresc@ y reinventarte constantemente, darle algo nuevo a tu público que los deje siempre sedientos de más. En un principio, la que tenía el trono listo para ella era Britney; claro, eso hasta que quedó embarazada 2 veces en un año, dejó de usar ropa interior, perdió la figura junto con la cabeza y se rapó el coco (un comportamiento nada princess-like). Y Clonetina, bueno, para ser reina tienes que ser original y ser original no es armar una mescolanza de varios estilos que realmente no van contigo (el sexo vende, pero el sexo con clase, no el guarro).

El mérito principal de Gaga (a mi parecer) reside en lograr sorprendernos a todos en una época en la que ya se ha hecho todo...O por lo menos eso pensábamos. Y no, no se fue por lo predecible y copió formatos ya prefabricados. Si bien Madonna es sexo y Lady Gaga se muestra sumamente sexual en sus videos y presentaciones, su trasfondo es asexuado en realidad. En una entrevista dada a la revista Rolling Stone en la edición de Junio/2010, la Mother Monster se declaró célibe ya que siente que el sexo drena su creatividad a través de sus genitales (algo totalmente opuesto a lo profesado por Madonna). No importa si no eres cool, si eres gay, geek, negro, ateo ó lo que sea: Gaga habla por los que no tienen voz, los freaks, los desadaptados, los excluidos, los rechazados, las minorías. Y si, Madonna también lo hacía y lo hace pero repito, el mensaje es distinto en fondo y forma. Lady Gaga representa hoy lo que Madonna significó en su época, así de sencillo. Subir los estándares y traspasar los límites, ir más allá y crear controversia: eso es lo que han hecho ambas y con éxito.

El glamour ya no es un peinado perfecto, un maquillaje impecable y un vestido de diseñador fabuloso pero no muy arriesgado. Ahora el glamour es vestir para impactar, plataformas con las que es casi imposible caminar, trajes extravagantes, cuero negro con puas, medias de malla rotas, lentes de sol, pelucas, un cigarrillo en mano y sangre...¡Mucha sangre!. Pueden decir que Gaga sólo exagera para llamar la atención, capaz es así, de igual forma funciona ya que todo el mundo se la da (ya sea para bien o para mal, pero hablan). Con sólo 2 discos de estudio, Lady Gaga ha evolucionado de una chica trash que hacía shows de burlesque a una rubia futurista de peinado simétrico, que se fue volviendo cada vez más bizarra, hasta lograr un look teatral que raya en el gore y en una apariencia casi inhumana que se va volviendo cada vez más y más sofisticada. 

¿Cuál será su siguiente paso? No lo sé, lo más probable es que no lo veamos venir y nos deje con la boca abierta. La Germanotta afirmó que "Born This Way" (su 3er disco de estudio, a salir a principios del 2011) es su mejor trabajo y será el himno de esta generación. Insisto, el mundo es de Madonna y muy pronto será de Lady Gaga, con corona de McQueen (R. I. P.) y cetro de la Haus Of Gaga en mano...En un par de años, espero leer esto y que se estampe una sonrisa en mi rostro al ver que, tanto ella como yo, teníamos razón (sé que así será).

martes, 14 de septiembre de 2010

"Lágrimas"

Cada lágrima es un "TE QUIERO", cada lágrima es un "TE EXTRAÑO", cada lágrima es un beso que no pude darte...Resulta ilógica la naturaleza masoquista del ser humano, va contra los principios de la supervivencia el perseguir deliberadamente y hasta el cansancio algo que eventualmente te causará dolor.

Lo sabes de antemano pero igual no puedes evitar ser consumido ante la letal hermosura del amor, ante un par de ojos acaramelados que te desnudan y destruyen lentamente, ante esos labios carnosos que te hacen alucinar y sentir como nunca antes...Gastamos horas dedicándole torrentes de pensamientos y fantasías a esa persona que nos devolvió la ilusión, dejamos que un par de sabanas sea lo único que cubra nuestra alma mientras nuestras piernas se entrelazan con las suyas y sus dedos recorren tu espalda a la vez que tus ojos van contando uno a uno los lunares que cubren su piel.

Todo esto para terminar llorando uno a uno esos días que pasaron juntos, esos momentos tan asquerosamente íntimos, románticos y especiales que creíste durarían, esos recuerdos de aquel amor efímero que pensaste sería inmortal. Sólo te queda llorar, ir desechando cada uno de sus besos, de sus caricias, de sus abrazos, de sus sonrisas, de sus locuras...Sólo queda la nada: tú, el vacío y los retazos roídos de aquello que llamabas corazón...Sólo te queda drenar, botar gota por gota los sentimientos que en algún momento te hicieron alucinar, todos esos momentos llenos de pasión y desenfreno, todas las cartas, todas las palabras y promesas que se fugaron con el viento y se quedaron en utopías carentes de sentido...Sólo te queda el crudo sabor de la sal, sólo te quedan las lágrimas, sólo te queda llorar...

"Cullen"

* Éste escrito no está basado ni inspirado en Robert Pattinson.

Nos sumimos en un beso cargado de pasión y deseo, sentía su frío aliento recorrer mi cuello y sus dedos de porcelana acariciar mi espalda mientras los acelerados latidos de mi corazón me delataban y resonaban en sus sienes hasta esbozarle esa pícara sonrisa tan suya en el rostro. El forcejeo lo llevamos más allá de nuestro límite habitual, la adrenalina es la mitad de la diversión, no me importaba arriesgar mi vida si eso significa no soltarlo jamás. Pude sentir cómo se dejaba llevar por la sed y sus ojos, siempre tornasolados, se ahogaron en deseo y en una furia desenfrenada que nos consumía a ambos. Sin darme cuenta rasgó nuestras ropas y fui presa de su perfección. Cada curvatura de su lisa y blanca piel, dura como piedra, derretían cualquier pizca de sentido común que aún pudiera quedar en mi. No me importaba morir, ya no importaba nada, sólo él.

Mis dedos memorizaron sus recovecos y mis labios difícilmente podían con la dureza de sus besos. Ruda, cruda, voraz, feroz, desenfrenada, desgarradora, sucia, descarada, dolorosa, alucinante: así era su manera de hacer el amor. Sin reparos despedazó mi ya de por sí frágil voluntad y llegó a lo más profundo de mi ser, sus movimientos pélvicos me obligaron a encontrar el placer que hay dentro del dolor.

Ya no podía más, bañado en sudor y con la respiración entrecortada pude mirarlo de reojo y observar la locura que reflejaban sus ojos. A pesar del esfuerzo no derramó ni una gota de sudor en su inquebrantable rostro que poco a poco fue transformándose en una mueca de consternación. Ya se le agotaba el autocontrol, el momento que tanto esperé ya había llegado: bebería mi sangre y pasaría junto a él la eternidad, podía olerlo. Fue abriendo su boca hasta dejar ver sus relucientes, blancos y afilados colmillos. El dolor ya no era más que una delicia para mi, sentí cómo succionaba mi sangre, lo disfrutaba en exceso, el olor llegó a marearme un poco pero el momento del clímax se acercaba para ambos, todo acabaría.

Mis brazos envolvían su espalda cada vez con menos fuerza. Ya no aguantaba más, me sumí en un orgasmo de delirio y muerte pero él seguía bebiendo, hasta la última gota. Ya debería haber parado, ¿por qué no se detiene?...En un abrir y cerrar de ojos me encontré desmayado en el suelo. La poca sangre que me quedaba se escapaba de mi destrozado cuello y formaba un pequeño charco de un color rojo oscuro, sus ropas ausentes indicaban que él se había marchado. Sumamente tonto fui al fiarme de uno de su especie, no era humano pero era un hombre después de todo. Las promesas se fueron escapando mientras mis latidos iban frenando, mi respiración ya era invisible. Cerré los ojos con desgano y más nunca los volví a abrir...

"Alicia"


Alicia es una joven de 15 años relativamente común y corriente: larga cabellera rubia, ojos brutalmente azules, carnosos labios color carmesí y una figura nada acorde con su inocencia. Alicia vive en un mundo utópico lleno de fantasías y maravillas típicas de la imaginación de una niña. Vive en un cuento de hadas producto de una infancia en la cual era mejor preocuparse por enanos, manzanas envenenadas, zapatillas de cristal y hadas madrinas que en los gritos nocturnos provenientes de la alcoba de sus padres.

Ya a los 5 eran sólo mamá, ella, las princesas y sus castillos. Con el pasar de los años, Alicia fue convirtiendo sus cuentos en su refugio personal; cada historia le brindaba el apoyo y la seguridad que no conseguía en ningún otro lado, la resguardaban de todo lo cruel que había en el mundo y la protegían, la tomaban de la mano y la llevaban a sitios en donde estuviera a salvo, donde nada ni nadie pudieran hacerle daño.

Como era de esperar, la adicción de Alicia la fue consumiendo poco a poco y, eventualmente, destruyó su capacidad de distinguir fantasía y realidad y, luego de pensarlo seriamente, llegó a la conclusión de que su vida era un cuento de hadas, de que pasaría por numerosas penurias hasta conseguir a su príncipe azul, con corcel  incluido, y que éste la llevaría glamorosamente hasta su reino y obtendría su "…y vivieron felices para siempre".

En el colegio era tildada por muchos como una niña tonta e ingenua, era vista como un ser insignificante y patético que carecía de relevancia, la única que la entendía era Bianca. Se conocían desde sus andanzas en el kínder y fue testigo de la infancia tan paupérrima que vivió Alicia, estaba al tanto de su problema y lo comprendía, le seguía el juego y era otro personaje más que residía en su país de las maravillas.


James, ese era el nombre de su príncipe; sumamente refinado y anglo como él solo, James. Era el epítome de belleza con sus greñas color azabache, su tez pálida y sus ojos acaramelados. Luego de gastar horas de ocio pensando en él y de un par de miradas cruzadas, James la invitó a salir. Alicia estaba nerviosa, se vistió con lo mejor de su guardarropa y esperó con agitación; dieron las 3 y James se encontraba ya en su puerta. Unos 20 minutos después se encontraban ya a obscuras con la pantalla del cine enfrente, las palomitas de maíz en los respectivos regazos y los dedos de James entrelazándose con los de Alicia.

Todo fue sucediéndose de acuerdo a lo imaginado por Alicia: disfrutaron la película, luego fueron a comer y la conversación entre ambos nunca dejó de ser amena y fresca a lo largo de la cita, obviamente tenían química. Ya se acercaba la medianoche y, como cuento de hadas al fin, era hora de que terminara la velada. Alicia se bajó del carro y James la acompañó hasta el pórtico, intercambiaron despidos y en una fracción de segundo sucedió, sin darse cuenta estaba teniendo su primer beso. Un calor invadió el pecho de Alicia y fue bajando hasta lo más profundo de sus entrañas, sintió que intercambiaban algo más que saliva y bacterias, era una sensación inexplicable que la llenaba de placer y ternura al mismo tiempo. Pasaron los segundos y cesó el movimiento de las lenguas, los labios dejaron de rozarse y se miraron a los ojos, James sonrió y ella, sonrojada, dejó escapar las más puras y hermosas palabras cargadas de una inocencia sin igual: "Te amo". James dio un paso atrás, su mano se desprendió de la mejilla de Alicia y lo invadieron las ganas de salir corriendo, sus pupilas se llenaron de ironía y de la manera más despectiva posible dijo: "ilusa".

Ni Alicia ni sus cuentos pudieron con tanto dolor, al ver a James alejándose en la oscuridad de la noche, las lágrimas empezaron a brotarle de los ojos de manera exagerada. Corrió hasta su alcoba e intentó ahogar su sufrimiento y sus lágrimas en su almohada mientras en sus adentros aún podía sentir cómo su corazón se resquebrajaba lenta y dolorosamente. Ya nada valía la pena, sus sueños se desplomaron como un castillo de naipes, comprendió lo frágil y efímera que era realmente. Despertó del letargo que la mantenía prisionera en su mazmorra, se esfumó toda pizca de inocencia que poseía y comprendió que la vida no es un cuento de hadas: si un hombre se lanza de un piso 15, su vida no pasa delante de sus ojos como en las películas, sólo quedan él y el tiempo que dure en chocar contra el suelo y desparramar sus sesos en el concreto.

Alicia cambió toda su inocencia por malicia y ganas de hacer daño, eso es lo que ocurre cuando experimentas una cruda dosis de realidad sin anestesia. "Dolor" se convirtió en sinónimo de "sentir", y "sentir" se convirtió en sinónimo de "vivir"; es una analogía bizarra, macabra y autodestructiva pero es la que quedó tatuada en su corazón, de ahí en adelante sólo los golpes bajos del destino y sus malas jugarretas la hicieron sentir viva, si sangraba quería decir que aún le quedaba algo de humanidad dentro de su alma. Eso es lo que pasa cuando te cierras a todo agente externo y un tren de vivencias te lleva por el medio, eso es lo que pasa cuando dejas a una niña suelta en el mundo y experimenta de primera mano el desamor, eso es lo que pasa cuando te das cuenta que la vida no es un cuento de hadas. La vida no es encontrar al príncipe azul, es besar sapo tras sapo tras sapo hasta encontrar algo que se le parezca.

"Ni de ti ni de mí (carta de un ninfómano)"

"Otro día, otra cama, otra piel, otros labios, otro sexo, otro olor en mi piel, otro cuerpo con nuevos recovecos, otro día que pasa sin remordimientos. Enciendo un cigarro y se desvanecen mis penas. Yaces ahí, inerte a mi lado, con una sonrisa en tu rostro que tiene mi nombre y apellido a pesar de que nunca te los di. Reconozco que estuviste muy bien, tal vez uno de los mejores, pero tienes que entender que realmente no eres tú, soy yo.
Si pudiera te entregara a ti todos mis sentimientos, te confiara todos mis secretos. Dejaría mi vida con cuerpo, alma y corazón incluidos en tus manos pero no puedo, entiéndelo. Hace bastante tiempo ya que no soy de nadie y ya no creo que quiera serlo; no soy de ti ni de mí, soy del que tenga suerte mañana y del que tenga suerte el día después. Soy del deseo, soy del placer, soy de la carne…Soy del destino que, a pesar de ser bien retorcido, en el fondo sabe lo que hace. Soy de este camino que he decidido recorrer; el que dijo que es mejor haber amado y sufrido que nunca haber amado, nunca sufrió o amó de verdad.
Ya me resigné a vagar sin rumbo, a ahogar mis penas en puro sexo, sudor y dolor. Ya me resigné a nunca dejarme querer (me rehúso a que eso suceda), así que insisto, no es tu culpa y, hasta cierto punto, mía tampoco. Así que no te preocupes cuando abras los ojos y no esté ahí para darte un beso de "buenos días" ni acariciarte ni darte las gracias por haberme amado y entregado todo tu ser, así haya sido por tan sólo un instante.
Créeme que lo que más deseo es algún día tener el coraje de arriesgarme y amar una vez más, de sólo amar y dejarme llevar, de volar. De que otros pies queden marcados en mi camino, de que otras manos me tomen y me guíen y me lleven hasta donde tengamos que llegar. De amarte a ti, de disfrutar, de vivir…Hasta que ese día llegue te pido por favor que no me esperes porque realmente dudo que se haga realidad o que estés incluido en dicha utopía, y me despido recordándote que no eres tú ni soy yo, que no soy de ti ni de nadie: Soy de la carne…"

"¡Me vendí!"

…Por un par de millones y un cd de 10 canciones al primer postor que se me apareció. Drené mis ideales por el caño y mi esencia se la llevó un cheque tan mísero como él solo. Por la oportunidad de ser famos@ dejé a un lado mis sueños y los reemplacé por unos más convenientes y oportunos. Dejé de ser yo; ya no soy tuy@ ni mí@ ni de nadie, sólo soy de mi público y de la magnánima firma anónima estampada en esos desnutridos cheques que me dan de comer. Dejé atrás ese sonido ecléctico que tanto me hacía vibrar por realizar tracks "chicle bomba" tan rosas, pegajosos, empalagosos, vacíos y carentes de alma que sólo yo y las masas inertes de la sociedad somos capaces de consumir y digerir.
A fin de cuentas no me puedo quejar, formo parte del "Venezuelan Star System" como siempre soñé, todo lo demás son sólo precios que hay que pagar, ya más adelante vendrá lo bueno: Tendré una comentada relación amorosa que terminará en desgracia y que más tarde se convertirá en el sencillo ícono de mi carrera (con video-clip incluido), saldré en todos los programas de farándula rumbeando en los sitios más "in" del C.S.I. y con la gente más bella de la fauna caraqueña, daré conciertos a diestra y siniestra a pesar de tener un repertorio de 5 canciones que nadie conoce. Después de cruzar la frontera y ser reconocid@ World Wide regresaré a la porquería que me vio nacer a ser lo mejor de lo peor de por estos lados y, luego de tener 2 o 3 muchachos, engordar y rasparme el coco o entrar y salir de rehabilitación o sufrir un colapso nervioso o lo que venga, regresaré más fuerte que nunca y con un álbum convenientemente listo para salir al mercado porque eso es lo que importa a fin de cuentas: Pagar el precio, hacer noticia y mover al mundo…¡Hacer buena música viene después!.

"Sexo con el concreto"



A la 1, a las 2 y a las 3...¡saltas y ya!. Todo acabó, el dolor se alivió, las penas se esfumaron junto con tu esencia y lo peor ya pasó. Indoloro, insípido, insignificante, rápido, efectivo, seguro, aprueba de errores y arrepentimientos. Sin vuelta atrás, lo haces y ya; sí o no, así de sencillo, no hay lugar para dudas, inconsistencias, inseguridad ni titubeos.

Los segundos parecen eternos pero no es como en las películas ni nada por el estilo, tu vida no pasa ante tus ojos en 5 segundos. Sólo piensas en cosas: en tus conocidos, en tu familia, en tu eterno amor secreto, en el dolor que les vas a causar a algunos, en la indiferencia que tu muerte le va a causar a otros. Piensas en muchas cosas, en lo bueno y en lo malo, te cuestionas todo hasta el último segundo, te dices que esa salida no era la correcta pero eso empeora las cosas. Se te acelera el corazón, las palpitaciones tan agitadas te destrozan las venas y arterias, no aguantas el ritmo de tal agitación, sientes un nudo en la garganta, deseas emprender vuelo o retroceder el tiempo pero es inútil, de nada sirve desear lo imposible ni añorar el pasado.

Ya falta poco, sientes que vas a explotar y así es, todo el dolor acaba antes de empezar. Te vienes y acabas antes de que empiece la acción por darle tanta rienda suelta a la imaginación. Sin darte cuenta tuviste el mejor orgasmo que alguien pueda desear o siquiera imaginar, algo que ni la misma Jenna Jameson concibe posible: sutil pero regio, suave pero agresivo, implacable, glorioso, patético. Sin darte cuenta ya todo pasó, te desparramaste sobre todo el pavimento. No eres más que manchas, tacazos de alma y trozos de sesos. Sin darte cuenta tuviste sexo con el concreto...¡el mejor amante que vas a encontrar!...Qué patético que algunos piensen así.