miércoles, 16 de diciembre de 2015

Top10: Mis discos favoritos del 2015


No, no vengo aquí a decirles que tengo la verdad absoluta en mis manos ni que soy una eminencia en lo que a conocimiento musical refiere, pero si vengo a dejarles por acá los que - a mi parecer - fueron los mejores trabajos musicales que vieron luz este 2015. Cabe destacar que intenté esperar por el lanzamiento de 'ANTI' antes de hacer este ranking pero bueno, más pudo Kanye West que yo:


10. Rebel Heart - Madonna




Sí, ya sé lo que van a decir, pero es la Reina del Pop y más allá de cualquier favoritismo que pueda haber de mi parte, que lo hay, Rebel Heart es un disco que sobrevivió a una filtración masiva y al ageism tanto de los medios como del público para brindarnos una veintena de tracks que quitan el mal sabor de boca que dejó MDNA y nos recuerdan que, con 57 años, esta mujer puede seguir haciendo buena música.


9. Honeymoon - Lana Del Rey




Este disco tuvo suerte al entrar en este conteo, capaz se lo debe a 'High By The Beach' + 'Salvatore'; tiene buenos tracks y un mood bien logrado de principio a fin, el disco te cuenta una historia - I give you that one. Pero no es, en lo absoluto, lo mejor que ha hecho ni lo mejor que hará Lana


8. Rub - Peaches




Esta mujer nos escupió a todos en la cara, nos abofeteó con su vagina, nos orinó encima y nos encantó. Este disco es un must, con sonidos futuristas, letras bizarras y una estética gender fuck que va más allá de las etiquetas.


7. Depression Cherry - Beach House




Este disco representó mi primer encuentro con este dúo de dream pop y fue amor a primera oída. Sí, también presentaron este año Thank You Lucky Stars, pero Depression Cherry es un trabajo que si bien no tiene picos, no aburre y hace que sólo te dejes llevar por un sonido dulce y bien producido.



6. Miley Cyrus & Her Dead Petz - Miley Cyrus




Trippy as fuck. Sólo así se puede describir este disco sorpresa de Miley Cyrus. Muchos están cansados/asqueados de Cyrus y su manera de venderse en los medios. Y sí, es válida la sobre-saturación, pero es innegable lo arriesgada y acertada que es esta placa musicalmente hablando. 


5. Art Angels - Grimes




Creo que Grimes es la Lenny Kravitz de la generación de Tumblr. Esta chica está tan involucrada en el proceso creativo de su música que es increíble, no se puede ser así de talentoso... Pero, guess what! You can, y Grimes lo es.


4. Blue Neighbourhood - Troye Sivan




Si bien este trabajo debut de Sivan es impecable, le pasó igual que a Years & Years y a Marina, perdiendo algo de impacto/factor sorpresa al escucharlo por primera vez, todo por haber soltado lo mejor del disco en singles y EP's mucho antes del lanzamiento oficial. Sin embargo, es una belleza de disco y es una belleza él.



3. How Big, How Blue, How Beautiful - Florence + The Machine




Florence se superó a sí misma y nos regaló el cual es, para mí, su mejor trabajo discográfico hasta la fecha. Las voces, las letras, la producción; todo se conjuga a la perfección.



2. Beauty Behind The Madness - The Weeknd




Quiero que dejen de hablar sobre el cabello de The Weeknd y empiecen a apreciarlo como lo que realmente es: un genio de la música. Sexo puro es lo que te vende este disco y se le compra con todo el gusto. 


1. E.MO.TION - Carly Rae Jepsen




Bastante me llené la boca hablando mal de Carly Rae Jepsen en el pasado y en 2015 me comí una por una mis palabras con este disco que es, por lejos, el mejor del año. Más allá del mérito que tiene Jepsen de haber cambiado en mí la percepción que tenía de ella (just like Taylor in 2014), este disco es una joya del pop con 18 tracks que te llevan a los 80's - 90's siempre que lo escuchas. Cada canción es un single - just A.MA.ZING.



martes, 31 de marzo de 2015

Top5: Selena's Most Iconic Fashion Moments




Pareciera que apenas ayer Jennifer López fue elegida para representar a Selena Quintanilla en la gran pantalla y plasmar en una película la historia de quien posiblemente se hubiera convertido en la artista latina más relevante del mercado anglo. Olvídense de Shakira; el primer crossover masivo lo iba a hacer la reina de la música tex-mex con un bustier, los labios pintados de rojo delineados con lápiz negro, uñas acrílicas que serían la envidia de Ivy Queen y el cabello lleno de gel y laca.

Sí, la música es lo que llevó a Selena al estrellato, pero también lo hizo su estilo y su fashion sense, haciéndola destacar en una época en la que estrellas de la talla de Madonna hacían ruido en el mercado musical y rompían las barreras y los esquemas de la convencionalidad a la hora de vestir. 





Estas palabras se quedan cortas para el impacto que tuvo y tiene Selena en la música, la moda y hasta en la cultura. Pero a 20 años de su asesinato, me parece propicio dedicarle un espacio en este blog a quien fuera una de las artistas favoritas de mi infancia y aprovechar la ocasión para recordar los que son, para mí, sus fashion moments más relevantes: 


5. 





4.



3. 


2.

 





1. 








sábado, 20 de diciembre de 2014

TOP10: Mis canciones favoritas del 2014

 Los discos necesitan de armonía entre canción y canción para funcionar como un todo sin puntos flojos. Una canción sólo necesita un buen ritmo, letras interesantes y un coro pegajoso. Aquí las canciones que más canté en estos 365 días:



10. Rebel Heart - Madonna




¿Quién puede tener un demo filtrado sin lanzamiento oficial catalogado como un single por Billboard? ¿QUIÉN? La espera del sucesor a 'MDNA' no llegará hasta marzo de 2015 pero cerramos este año con una probada de lo nuevo que prepara la Reina del Pop. 



9. Fancy - Iggy Azalea feat. Charli XCX




Iggy fue dueña de buena parte del 2014, y el éxito de 'The New Classic' se lo debe enteramente a esta canción. Admito que ya estoy a bit over Azalea pero no puedo tapar el sol con un dedo.



8. ***FLAWLESS (Remix) - Beyoncé feat. Nicki Minaj



Beyoncé. Nicki Minaj. Un billón de dólares en el ascensor. Yo me desperté así. Himno de una generación. Eso.



7. Ba$$in - YELLE

 
Fácil, de lo mejor que ha hecho YELLE en su carrera. Escucharla es querer bailar y bailar sin parar. La industria y nuestras vidas necesitan más canciones como esta.



6. FROOT - Marina & The Diamonds



Marina tiene el honor de poseer mi disco favorito en la histora: 'Electra Heart'. Este sencillo es su regreso a la escena y lo hace con letras inteligentes, un sonido funky y un coro que no se sale de tu cabeza una vez que entra. 



5. Do It Again - Robyn & Röyksopp




En la unión está la fuerza y este EP tan épico es prueba de ello. Robyn nos tiene acostumbrados a darnos canciones icónicas y no nos defraudó ni un poco con este single. No podemos olvidar que este proyecto también nos trajo 'Monument', una obra de arte hecha .mp3 tan atemporal como perfecta.



4. Opulence - Brooke Candy




Esta rapera tiene mucho tiempo haciendo ruido y finalmente logró hacer su primer lanzamiento oficial con lo que es mi EP favorito del año. De bailar en un vídeo de Grimes a ser la protegida del reconocido estilista Nicola Formichetti, Brooke Candy dio su primer paso oficial en el mundo de la música y lo hizo en grande.



3. Blank Space - Taylor Swift


Una canción cala y pasa a la historia cuando la gente se puede identificar con la letra y si alguien sabe cómo hacer que eso pase, es esta chica. Swift tiene un historial de plasmar su vida amorosa de manera genuina en sus creaciones musicales y su cambio de género no alteró esa cualidad de su trabajo. Himno de aquí a Pekín.



2. Hideaway - Kiesza




Desde la primera vez que la escuché, esta canción se convirtió en una de mis favoritas de todos los tiempos. Es perfección musical de principio a fin; es extraño cómo un track tan cargado de influencias del pasado puede sonar tan fresco e innovador. 20 puntos para Kiesza



1. Anaconda - Nicki Minaj


Si alguien realmente "rompió el Internet" este año, fue el culo de Nicki Minaj. Ni Sir Mix-a-lot pudo predecir que su canción alcanzaría nuevas alturas en 2014 en lo que es fácilmente el sample mejor utilizado en la vida. Felicitaciones a Minaj por esta pieza que, si bien no pega para nada en 'The Pinkprint', se adueñó de nosotros y aún no nos suelta.


viernes, 19 de diciembre de 2014

TOP10: Mis discos favoritos del 2014


  Esta lista, como todos los conteos musicales, es subjetiva y está tan equivocada como acertada. Los invito a leer, opinar y darle una oportunidad a lo que aquí esté publicado que no hayan escuchado so far. Acá, los discos que para mí, fueron lo mejor que parió el 2014 - musicalmente hablando:



10. LP1 - FKA twigs


Esta chica inglesa se las trae, no sólo con su voguing y su relación con Robert Pattinson sino con un LP impecable. Toda una obra de arte sonoro digna de cualquier iPod.



9. Broke With Expensive Taste - Azealia Banks


Este es quizás el disco debut más anticipado/retrasado de cualquier artista en tiempos modernos. La mala actitud de Banks y sus riñas innecesarias por Twitter son - para su suerte - opacadas por lo que es un disco increíble. Hip-hop del bueno, beats modernos, ritmos eclécticos y una rapera con una buena singing voice: todo bien.



8. Blue - iamamwhoami 


Los artistas suecos suelen hacer cosas perfectas, si no me creen, pregúntenle a Robyn. Y 'Blue' de iamamwhoami no es la excepción; de principio a fin, no tiene pérdida. Este es un disco que simplemente te llenará de amor y paz al escucharlo, sumándole a esto lo brutal que es la propuesta visual.



7. Tremors - SOHN


Creo que no saben lo difícil que es que me guste una voz masculina, mucho más que la tolere por un disco completo. Y aún más improbable es que me guste el disco en su totalidad y lo escuche más de una vez, pero justamente eso es lo que pasó con SOHN. Este año lo conocí y este año me enamoré de él porque eso es lo que te hace este disco.



6. Sound Of A Woman - Kiesza




Esta canadiense se encargó ella sola de traer al 2014 los ritmos de los clubs de los 90's. Sí, cometió el error de soltar sus mejores tracks antes del lanzamiento del disco pero eso no le quita mérito a lo que es una pieza sólida y prometedora. Queda de ella evolucionar y seguir desarrollándose como artista ya que el talento y los pasos de baile, los tiene.



5. Complètement Fou - YELLE 


En esta oportunidad, esta chica francesa se unió al icónico Dr. Luke para darnos otra placa llena ritmos bailables, canciones pegajosas y con visuales tan hipsters y homosexuales que it's not even funny. Porque sí, el pop europeo is the best kind of pop.



4. Goddess - BANKS


Sí, son 18 tracks pero valen la pena. Los discos tan largos suelen ser pesados al escucharlos completos pero 'Goddess' es tan bello que no importa. BANKS en su mejor momento musical como tal per se.



3. Ultraviolence - Lana Del Rey


Lana es una de esas artistas que despiertan pasiones extremas: o la odias o la amas. Sí, Lana es un personaje, un producto, una ficción, pero te lo vende deliciosamente. Además, en esta oportunidad, Lizzy se encarga de llevar su personaje de Lolita sufrida un paso más allá y alcanza lugares oscuros a los que no había llegado antes en su carrera. 

 

2. The Pinkprint - Nicki Minaj




Creo que lo único malo que tiene este disco, es que posee 22 canciones y sólo eso evita que esté en la primera posición. Atrás quedó la Nicki de pelucas de caramelos y colaboraciones con David Guetta. Los featurings, que no escasean en esta producción, brindan algunos de los mejores momentos del disco sin quitarle protagonismo a Minaj, quien se encarga de darnos una obra maestra que prueba quién es la reina del rap. Y sí, my anaconda don't ~ 



1. 1989 - Taylor Swift

 
Para entender qué hace Taylor Swift en el primer lugar de la lista, hay que entender lo mucho que yo aborrecía a esta niña. Y hacerme pasar del odio a saberme toda la maldita letra de 'Blank Space' de memoria, merece toda mi admiración. De princesa del country, pasó a ser la mujer más relevante del pop y del ámbito musical en general en el 2014 - que lo digan las ventas del disco si no me creen. Pop en su estado más puro y sin diluir, todo un must sin duda alguna.

miércoles, 4 de junio de 2014

Villana por accidente



Esta sería la traducción al español del título de esta película si la susodicha fuera una comedia. Porque sí, Maleficent (2014) se toma muy en serio el argumento de contar la historia desde el punto de vista de esta icónica villana del universo Disney, al punto de justificar sus acciones y convertirla en una mártir que busca a toda costa revertir el mal que ha hecho y conseguir el perdón de aquella que era el blanco de su venganza hacia el rey Stefan: la princesa Aurora.

Angelina Jolie como Maléfica es todo menos un ser maligno, aunque capaz era mucho pedir una oda al mal por parte de una casa cinematográfica que es responsable de títulos como The Princess Diaries (2001) y Bambi (1942). Quienes esperaban algo similar a lo que hizo Charlize Theron en Snow White & The Huntsman (2012) - yo incluido - deben bajar sus expectativas o apuntarlas en otra dirección.

Las libertades creativas que se tomaron los realizadores y los cambios en la mitología de la historia con la que todos ya estamos familiarizados, son grandes y notorios. Para disfrutar esta película con plenitud, hay que sacarse del disco duro todo lo que se recuerda o se sabe sobre "La Bella Durmiente" y tomar este acercamiento al cuento clásico como una historia totalmente nueva y diferente, para bien o para mal.

El vestuario y los efectos visuales destacan como los puntos más fuertes de Maleficent, junto con la actuación de Jolie - quien lleva sobre sus hombros todo el peso emocional del largometraje. La que deja mucho que desear es Elle Fanning, cuya princesa Aurora es tan feliz e inocente que raya en lo insoportable; no se desarrolla una empatía mayor con su personaje e importa muy poco cuál es su destino: todo es sobre Maléfica. 

No estamos hablando de una película mala o aburrida, en lo absoluto. Pero sí sobre una cinta que si bien no decepciona, le brinda al público algo que quizás no esperaba consumir.




martes, 20 de mayo de 2014

Casual



Llegué puntual, ya estabas allí. Cruzamos miradas. Sabía que eras tú, tu fotografía no mentía. Sin darme cuenta, ya me tenías contra la pared. Un “hola” era todo lo que hacía falta para que los botones volaran. Un pequeño rincón apartado del mundo era suficiente, cuatro pies en un mismo cubículo, ¿para qué más? ¿Para qué la formalidad? Era lo que era: un momento de placer, un arrebato fugaz de pasión, un idilio perpetrado en el anonimato, lujuria vacía y pasajera… Sexo, más nada.

Sentía tus palpitaciones en las mías, nuestras manos hacían desastres mientras tus gemidos se ahogaban en el silencio; nadie se puede enterar. Invertimos roles y tomo el control del juego, deslizo mis dedos hasta tu cremallera y tu sexo no tarda en encontrar el camino hasta el exterior. Mi lengua sabe lo que hace y tu expresión lo comprueba. Lo saboreo, lo disfruto: el calor, cada vena, su textura suave, sus curvas, su dureza, todo mío.

Continuo hasta saber que ya no puedes más y me detengo en seco, no quiero que acabe así. Me doy la vuelta, mis pantalones tocan el suelo, ¿qué mejor manera de decirte que me hagas tuyo? No pierdes el tiempo y siento cómo cada centímetro va entrando poco a poco, abriéndose camino y acomodándose al compás de tus ganas. Te siento en lo más profundo, tus embestidas, cada vez más duro, cada vez más rápido, cada vez más fuerte…Así, sabes cómo me gusta… ¡¡No te detengas!!

Los chorros de sudor invaden mi frente y avanzan hasta cegarme; el éxtasis me tiene sumido en un trance, hipnotizado. Ya no hay dolor, sólo un placer tan intenso que es casi insoportable. Justo cuando ya no puedo más te siento aferrarte a mí con más fuerza, con desespero; me destrozas por completo pero así es que me gusta. Así seguimos hasta explotar al unísono y sentir un espasmo que nos recorre de pies a cabeza. Es difícil respirar pero te veo y me ves, cómplices en nuestra fechoría. Una media sonrisa picara y el olor a cloro me dicen que la pasaste bien, muy bien.

Queremos decir algo más pero es inútil pensar en palabras apropiadas para la situación, no viene al caso, de nada valen. Nos vestimos, un “adiós” indefinido y seguramente permanente es el cierre perfecto para la ocasión. Sigue tu rumbo, yo el mío; si nos vemos en la calle seguramente no nos saludaremos y voltearemos la mirada en dirección contraria. Nos utilizamos mutuamente para un fin específico, fuimos desechables el uno para el otro, el primer paso es aceptarlo. Casual, perecedero, insignificante…

Hagamos de cuenta que aquí nada pasó.



Juegos de manos


Jugamos un juego de nunca acabar, jugamos el juego de acabar y callarJugamos a ser algo ficticio, jugamos a retarnos intelectualmente como un flirteo sexual de la mente. 

Jugamos con nuestros cuerpos a distancia como adolescentes con fantasías a las que, intimidados, tememos ver materializadas. Juegos peligrosos, como el encendedor y el papel - cenizas que se las lleva el viento. Juegos inocentes - o al menos eso nos repetimos para vivir en santa paz con nuestras vidas y nuestra ciega conciencia. Escapes que conllevan al remordimiento, remordimiento que se va desvaneciendo junto con lo que creía ser. 

Desprendimiento del yo: soy testigo y protagonista; todo lo veo desde afuera y desde adentro, como un narrador omnisciente e impotente y no me reconozco. Las dos caras de la moneda, las dos facetas del personaje: víctima y victimario; juez, verdugo y cadáver decapitado.

Balbuceas. Divagas. Tipeas. Hilas de manera deficiente una idea. El sentido se te escapa así lo tengas en la punta de los dedos, pero en eso consiste la vida.



viernes, 16 de mayo de 2014

Tortura eterna a puerta cerrada



"El infierno son los otros". Éste es el mantra de No Exit, un texto original del filósofo francés Jean-Paul Sarte y adaptado en los espacios de la Sala Rajatabla por el grupo de teatro La Salamandra, bajo la dirección de Loredana Volpe. 

Tres extraños (Garcín, Inés y Estelle) son conducidos por un mayordomo (Nailse) a una habitación de hotel en la que no hay ventanas ni espejos; nada más que tres muebles, una estatua de mármol, un abrecartas y la presencia del otro. Todos saben muy bien dónde están y por qué están allí. Han muerto y están en el único lugar en el que podían terminar tras sus acciones en vida: el infierno.

Sin poder pestañear ni dormir por la eternidad, esperan inútilmente a un verdugo que nunca llega. Esperan hasta darse cuenta que serán juzgados y torturados entre ellos mismos en un lugar donde el tiempo no se detiene. Miradas ajenas que nunca paran, miradas que desnudan hasta lo más oscuro del alma y condenan, castigan, mantienen viva la culpa que los carcome por dentro.

No Exit es una obra existencialista hasta más no poder, y mantiene al espectador en una tensión perenne. Claustrofobia, angustia e incertidumbre es lo que transmite la pieza; un infierno en las tablas. Las actuaciones del trío de protagonistas - Edmundo Bianchi, Loredana Volpe y Fabiola Arace - son sólidas, destacando personalmente la interpretación del personaje de Estelle (Fabiola Arace). Mucha mierda para un montaje que si bien es denso y pesado emocionalmente hablando, te recuerda las cosas buenas que se pueden hacer en casa.


miércoles, 14 de mayo de 2014

Hip-Hop en femenino



En el mundo del hip-hop siempre ha predominado la testosterona. Las féminas por mucho tiempo sólo cumplieron un papel misógino siendo la “perra” de alguien. Con los 90’s llegó el cambio de roles y eran las “perras” quienes hacían de los hombres sus perras. Sería irresponsable hacer una disección del hip-hop femenino actual sin al menos hacer mención a Salt N’ Pepa, Queen Latifah, Lil’ Kim, Khia y hasta Eve, quienes pavimentaron el camino con sus rimas y alcanzaron el éxito y el respeto en un mundo de hombres, aún teniendo trompas de falopio.

Actualmente existe un boom de raperas femeninas que comenzó con Nicki Minaj. Pelucas rosas, vestidos con más colores que un arcoíris, colaboradores que van desde Lil’ Wayne hasta Britney Spears, una riña con Lil’ Kim y una habilidad para rapear envidiable: Nicki – y los múltiples alter-egos que se inventó – tiene todo para ser una grande del hip-hop y lo está logrando. Sus más grandes detractores la acusan de haberse vendido y de ser un producto netamente comercial, por lo que Minaj dejó en el guardarropa de Katy Perry todas sus pelucas y está volviendo a sus raíces: el ghetto. No sólo su cambio look es prueba de eso; las canciones que se han filtrado de su disco nuevo, hablan por sí solas.


Otra chica que ha venido haciendo ruido desde hace un par de años, es Azealia Banks. Azealia hace lo que no muchas raperas pueden hacer de manera exitosa: rapear y cantar. La primera vez que Banks hizo ruido en la cultura pop, fue en una colaboración con los también neoyorkinos de Scissor Sisters (“Shady Love”) pero todos sabían quién era Azealia cuando “212” caló en las radios, en blogs de Tumblr alrededor del mundo y hasta en un tráiler de Sofia Coppola. Banks tenía todo para lograrlo en grande y ser parte de la realeza, pero ha estado más ocupada peleándose con media humanidad por Twitter que terminando su álbum debut. But only time will tell.


Exportada desde la tierra que nos trajo a Steve Irwin y Nicole Kidman, llega Iggy Azalea. Desde sus inicios con la pegajosa y viral “Pu$$y” hasta sus colaboraciones varias con T.I., Azalea está lejos de ser una novata a pesar de que su primer disco de estudio, 'The New Classic', debutó apenas el pasado 20 de abril de 2014. “Work” fue su primer single relevante y lo tenía todo: vestuario de alta costura, versos rápidos y un beat digno de los iPods de los hipsters del mundo. Las críticas con respecto a su debut musical han sido variadas, pero hay que tomar algo en consideración: Iggy rapea, pero es comercial. Sus letras son superficiales (más no banales), sus canciones poseen fórmula de hit radial y sus colaboraciones incluyen a Ariana Grande y Rita Ora. So, she great, but she ain’t hood.


Por último, una rapera con la que los fanáticos de Grimes que han visto su video para “Genesis”, ya deben deben estar familiarizados: Brooke Candy. La world wide web ha sido el escenario de Brooke hasta este año, en el cual finalmente firmó con una disquera (RCA Records) y Nicola Formichetti (antiguo director creativo de Mugler y Lady Gaga) la tomó como su protegida. Candy se gana todo los puntos en lo que a mejor avance se refiere; pasó de ser algo totalmente casero y bajo presupuesto, a estar en vías de ser una reina del rap en prácticamente un año. Así como Iggy es blanca y comercial, Brooke es blanca, comercial, con una fanaticada mayoritariamente gay y una capacidad de rapeo bestial.




La nueva camada de raperas es atípica y poco convencional para los estándares del hip-hopero hardcore, pero allí es donde radica la genialidad de cada una.



martes, 13 de mayo de 2014

La Venezuela Paralela



Esa Venezuela donde no pasa nada. Esa en la que las protestas no son más que un eco distante que no opaca el brindis de las copas de oro ni se escucha por encima del estridente reggaetón en la punta del cerro. Los dos extremos del espectro. Los que tienen mucho y los que carecen de todo.

Esa Venezuela en la que las parejas se besan en Plaza Venezuela bajo la luz de la luna, con cientos de militares armados a una cuadra de ellos. Esa Venezuela que disfruta conciertos, con bombas lacrimógenas explotando a metros de distancia. Esa Venezuela que no se preocupa mientras el charco no le salpique.

Esa Venezuela que no abre los ojos mientras la sodomizan y le arrancan la libertad de las manos. Esa Venezuela que se hace la sorda para poder dormir tranquila. Esa Venezuela en la que muchos dicen darlo todo por el futuro de su país, pero no le dicen que no a la rumba del viernes.

El miedo puede más que nosotros. Asume tu peo y deja los cuentos: tú también vives en la Venezuela paralela.

martes, 29 de abril de 2014

La muerte les sienta bien




Creo que nunca me había reído tanto con una obra de teatro como lo hice con esta. Entrar sin expectativas y con el miedo de saber que se trataba de una pieza "interactiva", fueron despejadas las dudas de si valdría la pena el gasto en las entradas o no con los primeros dos diálogos de los personajes y la entrada de los mismos.

Cuatro mujeres se ven congregadas en un funeral sin saber quién es el difunto, pero el rendir condolencias no es la razón por la que están presentes en el sepelio, sino intereses personales que irán siendo develados a lo largo de la obra. Cuatro mujeres tan reales como las que laboran o estudian contigo, y eso es lo que te hace amarlas y reírte con/de ellas. Esta es la sinopsis de Te dejo la corona, una pieza original de Karin Valecillos, llena de humor negro que le hace una disección de la mujer venezolana, a la sociedad y a la situación actual del país.

El golpe certero que le da esta obra al espectador, es apaciguado por la risa. Desde las reinas de belleza hasta el gobierno nacional son criticados en esta obra, pero a través de la comedia. El guión se vale de un lenguaje actual y coloquial pero bien pensado para lograr su objetivo.

Lo más atractivo de Te dejo la corona está en la intriga que se crea en el público, desde la convocatoria al montaje hasta la interacción que se hace con los asistentes durante el mismo. Una propuesta que busca captar a un público amante del teatro, que busca opciones nuevas de entretenimiento más allá de las tablas. Risas de principio a fin, a pesar del luto.

miércoles, 23 de abril de 2014

Mucho ruido, poco pelo



Pelo Malo es una de esas películas que crean expectativas enormes alrededor de sí y esto es un arma de doble filo. Los numerosos premios que ganó esta obra de Mariana Rondón en el extranjero y lo tardío de su estreno en la cartelera nacional, lograron que el público se interesara en verla pero esperando disfrutar del mejor largometraje de sus vidas – lo cual es un reto de por sí para cualquier film.


La historia se centra en el personaje de Junior (Samuel Lange Zambrano), un niño de 9 años y pelo crespo que sueña con alisarse el cabello para su foto escolar. Esta resulta ser una petición que su madre, Marta (Samantha Castillo), no sabe cómo manejar. Viuda y desempleada, Marta se debate entre el amor por su hijo y sus prejuicios contra la homosexualidad, lo cual hace mella en la relación entre ambos y es el detonante para un conflicto que irá in crescendo a lo largo de la trama. 


Como ya es común en el cine venezolano, Pelo Malo toca de cerca la realidad del país y refleja la pobreza que se vive en muchos sectores de la población. Con los bloques caraqueños del 23 de Enero como escenario principal, la película no sólo plasma realidades sociales de manera vívida, sino que coloca al espectador en un contexto histórico que le da más credibilidad a la pieza. 


Más que un largometraje sobre la homosexualidad, es un film sobre la familia y sobre cómo una mentalidad retrógrada a veces puede más que el amor. Con actuaciones impecables (lo más destacable de todo), un guión sólido y humor inteligente, es una producción que vale la pena ver. Cada espectador decidirá si al final la película cumple con sus expectativas, pero en definitiva, Pelo Malo no puede salir de cartelera y haber sido pasada por alto.


martes, 15 de abril de 2014

Temor conjugado en presente y futuro

Temo por las generaciones venideras. Temo por el declive en las referencias de su cultura general. Temo por los que nunca verán Casablanca ni sabrán quién coño es Judy Garland. Temo por el día en que Marilyn no sea un ícono del sexo, el glamour y la belleza. Temo por el día en que a nadie le importe saber qué le pasó a Baby Jane. Temo por el día en que la única "masacre en Texas" sea la de Jessica Biel. Temo por el día en que Gatsby ya no sea grande. Temo por el día en que John Waters no sea sinónimo de irreverencia y originalidad. Temo por quienes no sentirán vértigo viendo una película de Hitchcock. Temo por quienes dicen que Lady Gaga es el futuro de la música pop. Temo por la banalidad que se reproduce como ratas en celo. Temo por el mundo que crearán los que crecieron viendo 'Somos tú y yo'. Temo por la basura putrefacta que  consumen nuestras mentes día a día. Temo por el bombardeo decandente del que somos víctimas. Temo por ti, por mí y por el hecho de que no puedo dejar de keep up con las Kardashians. Temo, pero nada hago al respecto.


lunes, 3 de febrero de 2014

La Nena y su Caracas bohemia








Por: Kike Sánchez | @unpollofrito
 


“¡Está loca!”. Con esa frase describen a Sofía Bertolotto todos los que escuchan su historia de éxodo actoral desde afuera sin conocerla, ni a ella ni a sus razones. Lo que empezó como una mera gira promocional para Nena, saludame al Diego, terminó en un idilio de seis meses entre “Sofu” y la urbe de los techos rojos, los precios en alza y el Metro con retraso.



Su andar calmado,  su manera relajada de vestir, su carencia de maquillaje que no le resta a su belleza, su mirada en la tuya mientras te sonríe y responde tus preguntas como si fueran amigos de años atrás. Es imposible que el carisma y la humildad de esta chica no cautiven al que tenga la buena suerte de conocerla. Ni el caos de una plaza pública ni el bullicio del tráfico compiten con el escrutinio a lo centrada que está.



La espontaneidad fue el detonante principal del cambio de coordenadas geográficas realizado por Sofía. Ella misma, desenfadada y sencilla, admite que no tuvo planificación alguna, y que si bien las condiciones capaz no eran las más propicias, su nómada interna tenía que aprovechar la oportunidad: “Yo me quedé este año y con la muerte de Chávez y las elecciones, las energías estaban en otro lado, pero yo dije ‘yo me tengo que quedar este año porque este año se me dio la posibilidad’. Tuve que estar disponible y abierta a aprovechar el momento. Haya sido por casualidad o causalidad, son cosas que no puedo explicar hoy porque aún están muy verdes”.



Estudió teatro desde los cinco años, lo cual pasó de ser un hobby a un primer amor actoral, y evolucionó en una terapia contra la timidez: “el teatro siempre estaba ahí, siempre estuvo y siempre está; si no veo clases de teatro, es porque estoy actuando en una obra”. Sofía tenía sólo 12 años de edad cuando participó en su primer largometraje en Argentina, La Ciénaga de Lucrecia Martel, en el 2001. El siguiente paso fue conseguir un agente, evento que aún hoy recuerda la extrañeza que le causó en el momento, ajena hasta ese punto a las convencionalidades del medio.



De allí en adelante, se vio sumergida en el mundo de los castings y las esperas de los callbacks: el pan de cada día para un actor que busca vivir de su arte. Para ella, como artista, hay que enfocarse en dar sin esperar nada a cambio ya que “eso libera y alegra”, y se asegura de rodearse de gente que trabaje por lo mismo: por la cultura, por la comunidad, por el arte.



Más que un mero aprovechamiento de las circunstancias, la estadía de La Nena en nuestras latitudes se vio motivada por su vena actoral, ávida de nuevas experiencias, y su sed de conocimientos sobre otras culturas distintas a la suya. “Para el actor, siempre lo natural y como algo esencial y fundamental, debe ser esa búsqueda de algo nuevo, de conocer, de ver ambientes y contextos distintos; las formas de relacionarse de la gente. Uno debe ser un observador para luego llevar lo aprendido a uno, a Sofía. De ahí, re-elaborar eso y hacer esa ensalada y ver qué sale. Por eso es vital viajar, conocer otras culturas; el actor tiene que buscar ponerse la piel del otro, no debe ser un miedo tener que recorrer mundo”.



Ese mismo encanto y sabor de mundo que le proporciona su acento de la cuna del tango al hablar, es quizás su impedimento y limitante más grande a la hora de buscar hacer vida profesional en Venezuela. También es un factor que ella misma define como un reto, y afirma le causa miedos e inseguridades como actriz al  buscar desenvolverse en el mercado local. Sin embargo, poca – casi nula - es la experiencia en audiciones que ha tenido en el país.



Quizás por cuestiones de un encasillamiento debido a su acento o a un mal momento de la industria en general, la sequía de ofertas laborales que hagan posible la permanencia de Sofía en Caracas se palpa en el hecho de que, desde finales del 2013, se encuentra nuevamente saludando al Diego. La Nena no señala culpables (aunque duda sobre tener el fenotipo estético adecuado para la televisión venezolana) ni hace referencias a una crisis cinematográfica, sino a una mala sincronización y a lo tardío que es el proceso creativo a nivel de las producciones audio-visuales: “El tema del cine y la tele es un proceso largo, no es que de un día para otro puedes conseguir trabajo. Hay que armar un guión, crear perfiles de personajes y bueno, lleva un tiempo. Tras promocionar la película, me quedé cuatro meses más, que es poco para dejar macerar, dejar madurar los proyectos, que surjan oportunidades”.



Al preguntarle sobre las dificultades de hacer cine en Venezuela y el contraste con el hacer cine en Argentina, Bertolotto resalta un símil entre ambas naciones: en los dos lados es difícil. “Lo que implica el cine es un gran equipo de trabajo, estar conviviendo con 15, 20 personas en el rodaje ya es medio complicado. Lo importante es tener un equipo donde todos entiendan el lenguaje de cada uno, que el director haya logrado armar un equipo que tenga su misma visión”. Sin embargo, esa espontaneidad e improvisación on-the-go típica del venezolano que tanto la enamoró, es el arma de doble filo de la industria y el defecto más grande que le señala: “En todos las filmaciones hay imprevistos, pero lo complicado de los rodajes en Venezuela es la falta de planificación”. Como sociedad, nos vemos reflejados en nuestros propios defectos.



Estos aspectos negativos no empañan el amor de La Nena por el país y por la que fuera por medio año, su ciudad. Y en especial, lo que más se lleva, es lo que le dieron sus habitantes: “Lo que más me llevo es de la gente, no sé si tanto de la ciudad. Porque si, yo soy muy callejera, muy de la bici, de andar en la plaza. Caracas es un caos, es un montón de cosas; me llevo la gente, el compartir, ¿no? Si tienes una tremenda ciudad y no tienes con quien compartirla, es una cosa. Pero si tienes una ciudad increíble y gente con quien compartirla, te llega distinto”.



La Caracas de Sofía es una Caracas de a pie, una Caracas underground, ajena a lo que las redes sociales dicen que está en boga. Olvida los locales nocturnos con DJs y La Vida Boheme y piensa en el Parque Los Caobos, en patear el concreto y respirar aire con sabor a calle en Los Próceres. “Más importante es lo cultural, lo que se vivió en el momento que la ciudad en sí”.



Si a alguien le sorprende su partida, es a todos menos a ella misma.  “Los límites de quedarme no los iba a poner yo, el tiempo fue poco, pero la verdad no es que me vine preparada para quedarme dos años”.  De La Nena se lleva haber conocido Venezuela, su cultura y a la gente “sensible, centrada y trabajadora” con la que convivió. Del país se lleva “un bagaje y una maleta gigante de recuerdos y experiencias” junto con la costumbre de trotar y la huella fitness del caraqueño acostumbrado a subir el Ávila, “un tatuaje venezolano que me va a acompañar para siempre”. 



Sobre un posible regreso, “vuelvo cuando vea que haya posibilidades de trabajar; de ofrecerse algo, lo haría”; dejando una ventana abierta de par en par a la colaboración de proyectos ya que las posibilidades, según ella, están y “hay mucha gente queriendo explorar y hay un público para eso”. Del país se despide, se manera inciertamente temporal, diciéndole: “Hay que aprender a darle forma a esta amistad”.